Consejos para una cita GAY
Es normal que estés ansioso antes de conocer a alguien en una primera cita y que desconozcas de qué hablar. Si ésta es tu primera cita con un hombre gay porque recientemente saliste del clóset o estás cansado de reprimir tus deseos, entonces debes estar doblemente nervioso, porque es algo nuevo para ti. La buena noticia es que todos los seres humanos, sin importar su orientación sexual, atravesamos por lo mismo, y ¿qué es lo peor que puede suceder? Que el encuentro no se repita y aprendas de la experiencia. De todos modos, aunque los resultados no dependen de ti, sí puedes poner de tu parte para intentar que la cita sea exitosa y a lo mejor conlleve a un romance. Estos consejos te servirán de ayuda en tu primera cita con otro hombre gay.
1. Ir con mente abierta
A menudo tenemos expectativas de lo que esperamos de otro hombre, sus cualidades emocionales y físicas, incluyendo el tamaño del pene. Hay que olvidar por un momento todas esas proyecciones y estar abiertos a lo que venga, es decir, a conocer a la otra persona tal como se presenta, sin ningún prejuicio. Conocerlo por primera vez no quiere decir que vas a salir de la cita comprometido ni casado, sino que vas a explorar relacionarte íntimamente con otra persona. A lo mejor terminan siendo amigos o más nunca vuelven a verse. Por eso no vale la pena proyectar un desenlace; sí es bueno ir con una actitud positiva, pero si no funciona, no es un fracaso. Cuando no hay expectativas y llegas con mente abierta, la cita se desenvuelve con mayor naturalidad y bajas tus mecanismos de defensa.
2. Buscar un lugar ideal para encontrarse
Para conocer a un hombre por primera vez, lo más recomendable es pautar un encuentro en un lugar público que no sea un bar, una discoteca o un cine. Los restaurantes son lugares ideales siempre que no sean muy bulliciosos y no tengan distracciones como una banda de música en vivo. Tampoco es indicado que se encuentren en tu casa o la de él porque entonces si se gustan probablemente terminen teniendo contacto sexual y eso puede terminar arruinando la cita. Si no quieren sentarse en un restaurante, entonces pueden reunirse en una concurrida plaza o en un parque donde haya otra gente. Asegúrate que el ambiente sea tranquilo y propicio para poder conversar prestando atención a lo que la otra persona dice.
3. Mantener un conversación amena y positiva
Una vez que se encuentren es importante proyectar una actitud positiva y conversar sobre temas amenos que no sean muy profundos ni superficiales. No llegues demasiado temprano ni tarde. Cuida tu apariencia para que te veas limpio y atractivo, sin caer en acicalarte más de la cuenta. No se trata de una entrevista de trabajo ni un concurso de belleza. Si eres musculoso, no te pongas ropa demasiado apretada. Hay que cuidar la expresión corporal y actuar natural, sin mostrarte afeminado pero tampoco con masculinidad artificial. La conversación es un diálogo, así que evita hablar solamente de ti. Si no toma la iniciativa de hablar sobre él, hazle preguntas para mostrar tu interés. Trata de no quejarte, ni criticar a otras personas ni traer temas negativos. Tampoco le cuentes toda tu vida, ni tus problemas.
4. No terminar la noche en la cama
Si disfrutaron la velada y sienten que hay química porque se gustan, al menos físicamente, despídanse con un fuerte abrazo y una caricia, y no olviden hacer planes de una vez para volverse a ver. No es recomendable ir a la cama ese mismo día por más que sientas deseos. La idea en el proceso de dating es que vayan desarrollando intimidad sin tener relacione sexuales, para así darse la oportunidad de conocerse mutuamente. El sexo vendrá después si en las próximas citas se siguen gustando. Si tienes sexo en esa primera cita, entonces hay posiblidad que uno o ambos luego pierdan interés. No es bueno apresurar las cosas.